20 enero, 2007

Los "Alias", "Motes", "Apodos" y "sobrenombres" varios

A mi en el colegio - en la EGB de la época - me bautizaron jocosamente "el oliva", mote que me puso el capullo del Agustín, un tipo feo como un pecado y tonto del culo que a falta de carisma personal se dedicaba a poner motes a los compañeros como forma de ganarse un rol en la clase, de buscar su difícil ubicación para encajar en el grupo.
Nunca supe si me decidió llamar así por la forma abombada y elipsoide de mi gracioso cráneo o quizás por la forma almendrada de mis bonitos ojos. Quizás fuese por mi tez olivácea - morena de inusual gracia, yo que sé, lo cierto es que el mote - afortunadamente - no fue secundado por demasiada gente por lo que quedó bastante desdibujado para mi particular alivio.

Hay motes o sobrenombres que se ponen "sin ton ni son", sólo por joder o molestar y que modernamente diríamos ahora que entrarían en la categoría de bulling.
Pero la mayoría de los alias suelen tener un sentido simbólico o una cierta relación con quién los ostenta. Por ejemplo, yo mismo desde bien pequeñito tuve el noble divertimento de etiquetar a mis amigos/as y conocidos varios con el sobrenombre o apodo de algún animal al que yo considerase que se asemejaban de alguna forma. Siempre fui muy zoofílico po lo que me divertía imaginar - por el aspecto - en que animal se convertiría esa persona en el caso de reencarnarse en una bestia.... hay personas que indudablemente tienen caras zoológicas sin excusas posibles. Mis excelentes conocimientos faunísticos siempre me han dado grandes posibilidades a la hora de zoometamorfosear a cualquier Homo sapiens.
Por ejemplo, Hugo no hay duda que en otra vida fue un enorme macho de morsa, con ese mostacho impresionante y esos ojos cavernosos. Cuando Hugo se nos muestra, divertido, en esos autorretratos tan sugerentes, con su gorrita de marinero.. es imposible no saber ver en él ese aire ártico y pinnípedo tan característico (de buen rollo, eh?).

Es en el trabajo donde más fácilmente acaban surgiendo simpáticos apodos o sobrenombres. Hilari me puso rápidamente el alias de Cobretti, por considerar que...."Cuando eliges una víctima, la atacas sin piedad con esa lengua viperina y la fulminas con tu verborrea y sarcasmo tan despiadados... eres como una cobra que escupe certeramente y sin piedad...eres dañino Cobretti, eres dañino". Bien, todo esto es cariñoso, naturalmente; como cuando decidimos bautizarlo como el orangután por su pinta de primate debido a las proporciones desmesuradas de sus enormes brazos y antebrazos (que casi se pisa cuando camina) en comparación con sus paticortas piernecillas! Lo más divertido fue comprobar como su pareja, Eva, ya le había bautizado con idéntico nombre mucho antes que nosotros lo hiciéramos tan acertadamente, je,je.

Más recientemente, el bueno del Basets, decidió que mi nuevo "look" con esa coleta a lo Kale borroca y mi evidente alopecia, indisimulable, que generosamente descubre mi cráneo frontal.. coinicidían graciosamente con la imagen del "buitre sabio", es decir, con ese buitre blanco con aspecto de gallinazo que tiene la cabeza calva y las plumas le penden del cogote con elegancia... l'Aufrany (el alimoche). Así que para Hilari soy el Cobretti, para Basets, l'Aufrany, y para Carles Calvera, "El Tete".
Cómo véis, es fácil dedicarse al noble ejercicio de bautizar a los que apreciamos o queremos en nuestro entorno, basta con tener suficiente sentido del humor para saber encajar tus propios alias cuando te toque a ti recibir tu ración.

Así, Carlitos Mora, es para nosotros "El Viejo Zorro" - por su evidente astucia y veteranía para manejarse en multitud de circunstancias laborales - o "El espalda plateada" por el aspecto cano de sus cabellos y su fiereza que le puede convertir en un temible macho de espalda plateada pasando de cero a cien en 1 milisegundo!!

Sílvia, la única "agent rural" que ha pasado hasta la fecha por el Vallès Oriental, fue más generosa y decidió llamar cariñosamente a Carlitos, "Richard" por considerar - según ella - que tenía un aire al superatractivo Richard Gere, ya en su etapa madura-senil, of course!! Las mujeres siempre tan calientes!

Bien, como podéis apreciar en esta vida solemos rebautizar a los que queremos o apreciamos mínimamente en nuestros entornos laborales, etc... así que los que estáis leyendo esto no tengáis duda alguna que, en algún momento, os asigné algún alias o mote.... y mucho antes que os llegase siquiera a apreciar un poquito... ya había imaginado que animalucho seríais - mamífero o ave - por vuestro singular aspecto.

Firmado: L'AUFRANY; COBRETTI; EL OLIVA; EL HUEVÓN (verdad, Damià!); EL HUEVO ; y que se yo la cantidad de alias, motes o apodos que me hayáis podido decir o pensar en la cara!!

2 comentarios:

  1. Anónimo10:18 p. m.

    Recuerdo algunos motes graciosos de épocas remotas y otros más recientes, ahí van:
    - los palillos: dícese de pareja hiperdelgada que estudiaba en la biblioteca de Virrei.
    - la adquisición: antiguo pretendiente, de profesión ingeniero, que merodeaba por la citada biblioteca.
    - el palomino: ratón de biblioteca y eterno pretendiente de Marta.
    - la oveja: antigua novia de Víctor, muy mona pero con aspecto borreguil.
    - los caganers: cada año los colocamos en el belén.
    - la perla: precioso mote de mi primita del alma, la Esther.
    - las pololas: automote de las titas.
    - el bicho: personaje femenino con un control total sobre el entorno.
    - la cochinona: sobra describir las características de la chica.
    - peix bullit: personaje un tanto insípido, pero bonachón.

    Hasta aquí una primera entrega bastante completa, si me acuerdo de más ya os los contaré.

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  2. Anónimo7:44 p. m.

    Faltan la Poseída, el Sicario, Garbancita y Diamantina, Paco el Malo, los Conejos y los Morancos
    :-)

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