15 septiembre, 2010

Guiños lingüísticos a la lengua castellana; las tahonas y los colmados, palabras olvidadas??


En mi ya lejana infancia , la de los años 70, no había llegado todavía -a Barcelona- la llamada "normalització lingüística". En mi barrio - Porta - y de hecho en todas las barriadas de la periferia - Nou Barris - había panaderías, que eran los establecimientos donde hacían el pan y lo ponían a la venta....
Ahora Barcelona está "farcida" de "forns de pa". Es cierto que todavía existe gran cantidad de establecimientos con rótulos bilingües por lo que podemos seguir leyendo una palabra hermosa, "panadería". Cada vez son menos porque "els forns de pa" se están imponiendo de forma acaparadora!! No me parece mal, no me malinterpretéis! Creo que es una expresión afortunada: "forn de pa", literalmente "horno de pan", no está mal, no señor! Es una expresión concisa, muy descriptiva y que se entiende intuitivamente (incluso para alguién que no sea catalán!!).

Pero hay una lengua - que es la materna - con la que desde tu tierna infancia aprendes a designar a las cosas, a ponerles nombres a los que asociamos un significado concreto. Y yo cuando entro en el Poble Nou a un "forn de pa" estoy entrado siempre, indefectiblemente, en una panadería, ja,ja. Hay cosas que son para toda la vida porque hemos quedado "impregandos" de ellas para siempre!!(la impronta o imprinting que dicen los anglosajones).
Hay una palabra que me gusta todavía más que panadería. En el número 195 del carrer Pujades hay un "forn de pa" que se llama "La Tahona del Mar" (panadería-pastelería).
Qué nombre tan bonito! Tahona, hay vocablos que son de una sonoridad redonda, te entran fonéticamente, sin más!! Ta-ho-na, es perfecto!!
Cuando miras el diccionario te dice que una Tahona es un molino de harina donde se hace el pan, pero que también es sinónimo de panadería. Supongo que en las antiguas tahonas en las que se hacía el pan se acabaría también vendiendo el mismo y harían las veces de molinos y de panaderías. Lo cierto es que yo sólo había reparado en las tahonas de Salamanca, Granada y algunas otras ciudades españolas (especialmente castellanas, andaluzas y extremeñas), pero nunca había visto un rótulo de "Tahona" en la misma Barcelona.
Me encanta que haya un establecimiento en el Poble Nou, un barri molt català i molt normalitzat en tots els sentits, en que sus propietarios hayan tenido el acierto de ponerle un nombre castellano tan sonoro, tan perfecto!! (al lado, en pequeñito se lee "forn de pa", no sea que les multen a los pobres, cuidadín, cuidadín).

Otro nombre que no sólo me gusta fonéticamente sino que me evoca imágenes entrañables es el de otro establecimiento, la típica "tienda de ultramarinos", el colmado!!
Otra palabra rotunda, redonda, poderosa.....COL-MA-DO!! PERFECTA PALABRA!!

Los colmados son tiendas - botiguetes - donde se venden todo tipo de comestibles, licores, bebidas, etc... Lo más divertido es que sus escaparates suelen ser auténticas obras de arte en miniatura ya que es bastante común que se alineen en perfecta armonía alimentos envasados y enlatados, botellas de licores, vinos, cervezas, agua, etc... En el interior de estos establecimientos suele haber un orden increible con estanterías inacabables en las que se almacenan más y más viandas. La sensación de hacinamiento, de espacio físico COL-MA-DO de todo tipo de productos alimenticios es total. Hay personas a las que no les gusta esta sensación de entrar en una tienda tan "recargada", tan "barroca"....pero a mi el hacinamiento de todos estos productos con sus etiquetas, mil colores, mil formatos, me chifla, me alucina!!!No pocas veces me he quedado extasiado, con la boca abierta, mirando desde el exterior uno de esos escaparates, esos aparadores imposibles, ja,ja. Me flipan!!
Creo que a los 15 o 16 años, no antes, me enteré que en catalán se llaman QUEVIURES. Hay palabras en catalán, igual que en castellano, que me gustan por su fonética, por su sonoridad, me resultan simplemente "bellas", pero no es el caso de QUEVIURES. Recuerdo que me quedé decepcionado cuando me enteré que los colmados eran "queviures"!!
En fín, en otras ocasiones es al revés y la palabra en catalán me puede resultar más atractiva que en castellano, pero estas dos palabras las reivindico en mi lengua materna porque me gustan mucho y quiero pensar que podrán convivir en perfecta armonía con "els forns de pa" y "els queviures", ja,ja.


Que no se extingan jamás los colmados y las tahonas y las panaderías, viva la diversidad lingüística.


PD: Aprovecho para decir que el decretazo por el cual todos los rótulos de cualquier tipo de establecimiento abierto al público deben estar rotulados al menos en lengua catalana y en caso contrario pueden ser sancionados económicamente con la preceptiva multa me parece una medida muy desafortunada, "fascista", que en nada ayuda a la convivencia de las dos lenguas y que lesiona el derecho a que un particular o empresa pueda poner el nombre que quiera y en el idioma que prefiera a su negocio privado.
Qué problema debe de haber en que cada cual llame como prefiera a su establecimiento; forn de pa, panadería o tahona, colmados o queviures, que más da!! Vaya precepto del medievo!!
Muy triste y muy provinciano!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Vistas de página en total